Baje las escaleras hasta el primer piso del liceo y entre al baño a lavarme la cara, por lo demás compre la típica pastilla con mentol, bueno sabia a lo que iba y no quiera tener el aliento de mal sabor, quería tener un buen olor. Salí al exterior del liceo y la espere. Los nervios aumentaban y esos minutos se hacían un tanto incómodos, hasta que ella cruzo el umbral de la gran puerta antiguo del liceo, se veía igual de nerviosa que yo, se acerco y me saludo con un cálido beso en la mejilla, a esas alturas, estaba aun mas nervioso, pero no porque me había enamorado o algo así, si no porque era la primera vez que interactuaba con una mujer en ese sentido.
Iniciamos la marcha hacia el bus, por suerte nos servía el mismo recorrido y éramos casi vecinos, conversamos las típicas cosas que son para interactuar por primera vez y aunque evitamos ser seguidos y observados por nuestros compañeros, nos fuimos casi todos en el mismo recorrido.
Ya llegaba la hora de bajarme del bus y no había sido capaz de dar un beso, hasta que me despedí y nos dimos un beso tímido y casi más cercano a la mejilla, me sentí tan, ingenuo, tan estúpidamente embobado, que llegue a la casa realice unos cuantos trabajos de estudio y dormí.
Al otro día en el primer recreo la busque y le pedí pololeo con tan solo un beso. Así pasaron los días y cumplimos una semana y descubrí que no sentía sentimiento alguno por ella, además por arte de magia apareció otra niña en mi camino… Alejandra, una niña especial morena, de estatura media, delgada, de bonitas facciones y fanática de los dulces llamados coyac o lolys. Por lo que termine aquella relación y de forma inmediata empecé otra con Alejandra y así pasaron unos cuantos días. Alejandra me gustaba muchísimo y ambos nos entreteníamos juntos.
Un día estábamos reunidos en el patio principal, el Niko, el Feli y el Cris, y llego al lugar una mujer de estatura baja , con un aspecto de punki, con lentes, la que se juntaba con otras dos compañeras más de la misma tendencia cultural, y un día de ese grupo, mas al que yo pertenecía, hicimos uno, y empezó el despertar, la distorsión en las fiestas y la amistad con mis tres amigas, Daria que era la que hablo en primera estancia, Liche que era una mujer alta, morena, muy cálida y simpática y Jazmín, delgada, alta, tez blanca, era de un ángel especial la que al tiempo Niko Jazmín empezaron una relación, la cual duro hasta casi el termino de la secundaria.
Yo seguí mi relación con Alejandra, hasta que un día gracias a Rodrigo, un compañero de mi curso, conocí de vista a Joseline, la que me fascino físicamente, ella era delgada, de curvas hermosas, de bonito y sexy rostro, estatura media, le gustaba la tendencia de lo gótico. No sé cómo, un día me acerque y le pedí vernos a la salida del liceo, y ese mismo día puse fin a mi relación con Alejandra. Ese día ya con menos nervios y más seguro, la espere afuera del liceo y la fui a dejar a calle Bascuñán guerrero, donde pasaba el recorrido que ella tomaba a casa. A los días después comenzamos una relación muy bonita.
No hay comentarios:
Publicar un comentario